Archive for the ‘abogado’ Category

La Gran Paternal

diciembre 31, 2023

Mi abogado, que es también actor, realiza una obra callejera. Es una pieza compuesta especialmente para dos actores, que se desarrolla en mi barrio. Nos encontramos en la cima de un taller de arte, abierto para la ocasión por la Gran Paternal. Bajamos por las escaleras y mientras un grupo sigue a la actriz, otros caminamos detrás de mi abogado. Yo estoy entre estos últimos. El tipo va apareciendo y desapareciendo misteriosamente ante nuestros ojos. Parece conocer todos los recovecos de la zona: patios, zaguanes, esquinas y estaciones de servicio. En cada lugar interpreta diferentes roles y situaciones. Se cambia de vestuario como por arte de magia. En un momento dado es un jeque árabe, en otros, un bailarín soviético, un nadador olímpico o un negro de las colonias. Todo lo hace en cuestión de segundos, casi sin que nos demos cuenta. Probablemente sea el mejor actor del mundo. Estamos a metros de Donato Álvarez y Juan B. Justo. Voy acompañado por mi perro, un chico muy calmo, viejito y apocado. Lo encuentro ahora, sin embargo, muy vital, sagaz y veloz. Casi no lo reconozco. Es como si hubiera rejuvenecido o como si lo hubieran cambiado. Hay un detalle que me inquieta: su rostro está despersonalizado. Quiero decir, tiene una cara lisa con dos puntitos negros, como botones pequeñitos, como ojos. Los restos de sus rasgos conocidos han desaparecido: ni su hocico negro, ni su media sonrisa, ni su mirada penetrante, ni su pelo desordenado. Me pregunto si esa cara abstracta no será el primer paso hacia la muerte. Quizás yo mismo terminaré, más temprano que tarde, teniendo esa misma cara. Él, inmune a mis pensamientos, sigue corriendo y saltando. Por momentos desparece de mi vista. Dejo de ver la obra y decido no prestarle más atención a las morisquetas de mi abogado, que son cada vez más espantosas. Mi atención se concentra en el perro, en sus derivas y paseos errantes, en su cara despersonalizada. Tengo miedo. Espero que no le ocurra nada grave. Sigo viéndolo aparecer y desaparecer ante mis ojos celosos. Todas las moradas son transitorias, señala el abogado. Y es que ya nos hemos adaptado demasiado, agrega, justo antes de desaparecer una vez más por Nicasio Oroño.